Con el fallecimiento de una persona cercana enfrentamos la realidad estresante y dolorosa de la muerte y el duelo. Hablar de la muerte significa hablar de separación y pérdida, lo que conlleva una situación difícil y de afflicción, sobretodo con los hijos. Ellos tienen muchas preguntas que necesitan una respuesta de parte de los adultos porque de lo contrario se quedarán con interrogantes que les puede causar angustia. En el caso de un adolescente que está pasando por continuos cambios físicos, psicológicos y conductuales el proceso de duelo se hace especialmente significativo adoptando muchas veces emociones negativas como culpa, enfado, miedos.

El duelo es un proceso de adaptación en el que debemos de aprender a vivir sin esa persona o sin aquello que hayamos perdido.

El propósito de esta charla es ayudar a nuestros hijos a entender mejor la experiencia del duelo, a conocer el proceso propio de estas etapas de la vida y brindarte las herramientas para acompañarlo.